Pequeñas acciones para disminuir el desperdicio de comida
No botar comida es un importante objetivo ecológico en el sentido más amplio de esta palabra. Según datos de la FAO, cerca de seis millones de niños y niñas mueren cada año de hambre en el mundo y todos los años se desperdicia 1.300 millones de toneladas de alimentos dejando además una inmensa huella de carbono.
Pequeñas acciones para disminuir el desperdicio de comida
No desperdiciar alimentos es un importante objetivo ecológico. Las sobras de comida en una casa parecen pocas. Creemos que no pasa nada si dejamos que algo de nuestros alimentos se echen a perder y vayan a la basura. Pero estadísticamente, si en cada hogar se bota algo de comida, combinado con la cantidad de alimentos que sobran en los restaurantes y supermercados, el tema se convierte en uno de los mayores problemas ambientales de la actualidad.
Según datos de la Organizaciòn de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, FAO por sus siglas en inglés, cerca de seis millones de niños y niñas mueren cada año de hambre en el mundo y todos los años se desperdicia 1.300 millones de toneladas de alimentos. “El informe «Estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo”, elaborado por cinco agencias de la ONU, revelaba que el número de personas que padecen hambre ha aumentado en el último año hasta alcanzar los 821 millones y situarse en los niveles de hace una década.
«El efecto acumulativo de los cambios en el clima está minando todas las dimensiones de la seguridad alimentaria, esto es, la disponibilidad de alimento, el acceso a los mismos, la utilización y la estabilidad”, sostienen los autores del documento.
Y por supuesto las regiones que más sufren el cambio climático y sus consecuencias sobre la alimentación son las más pobres y dependientes de la agricultura: en África, el 20 por ciento de su población (256 millones de personas) padece subalimentación; y en América Latina y el Caribe el número de personas que sufren hambre ha crecido en 2017 hasta los 39 millones de personas. Además, la mejora en la seguridad alimentaria que se estaba consiguiendo en Asia parece haberse ralentizado considerablemente.
Para tomar conciencia de este tema cada 16 de octubre se celebra el Día Mundial de alimentación que busca encaminarse a un mundo sin hambre.
En Chile, se desperdician 3.700 millones de kilos de alimentos al año. Según un estudio de la Universidad de Talca, cada persona podría ahorrar $200 mil pesos al año si no desperdiciara alimentos», afirmó la autoridad.Contribuir a disminuir el desperdicio de comid,a es una acción en que todos podemos contribuir. Para lograrlo hay que hacer cambios a nivel de políticas públicas pero también iniciar sencillas medidas que en cada casa uno puede comenzar a aplicar.
- Hacer una lista solo de lo que falta en la casa para no comprar demás.
- Planificar menú de la semana y comprar solo lo que se necesita para ello.
- No dejarse tentar por las ofertas de cosas que no se necesitan.
- Chequear las fechas de vencimiento de los alimentos.
- Comprar fruta y verdura de temporada.