En el marco de la jornada de cierre del 1er semestre, los y las educadoras del colegio participaron de una charla sobre equidad de género, organizada por Karen Salazar, Coordinadora de Equidad de Género y Bernardita Urzúa, Coordinadora de
Desarrollo Profesional de Educadores. La charla tuvo como fundamento el Ideario Educativo Común de la provincia chilena de la Compañía de Jesús y de un trabajo similar que se encuentran realizando todos los colegios jesuitas del mundo.
Estuvieron a cargo de conducir la conversación, Carmen Andrade, socióloga PUC, magíster en política y gobierno de FLACSO y actual directora de igualdad de género de la U. de Chile; Alejandra Energici, psicóloga de la U. Alberto Hurtado y doctora de sociología; y Pablo Astudillo, sociólogo de la PUC, máster en ciencias sociales con mención en género, política y sexualidad.
En la oportunidad, Carmen Andrade comentó que la sociedad se ordena a partir de diferencias sexuales que ubican a hombres y mujeres en roles distintos, lo que termina creando un sistema de desigualdad que, sin darnos cuenta, normalizamos. Ejemplo de lo anterior es que en la mayoría de las asignaturas se les da mayor relevancia a los hombres o que en el lenguaje, comúnmente, prevalece lo masculino, por lo que como comunidad de formadoras y formadores estamos invitadas/os a hacer lo contrario.
Por otro lado y consultados sobre cómo se trabaja la conformación de identidad de género dada la existencia de un espacio digital en el que es común la violencia y el ciberbullying, la experta respondió que era necesario acompañar y enseñar la convivencia digital poniendo especial atención en que esta surge como respuesta a las desigualdades: “La preocupación tiene que ver con por qué hay violencia contra las mujeres y las disidencias sexuales”, para seguir argumentando que para un buen trato digital, “en vez de prohibir, es mejor dar elementos para tratarnos de manera distinta”.
Ideario Educativo Común
Es importante mencionar que el Ideario Educativo Común, documento base para el desarrollo de nuestro PEI, respecto de este tema indica lo siguiente:
“Ante asuntos relativos al género y la diversidad sexual, nuestros principios orientadores son la apertura, el reconocimiento y el respeto de la dignidad de toda persona como hija o hijo de Dios, acogiendo a todas y todos con amor y sin discriminación. El acompañamiento en estas materias será desde criterios evangélicos y una perspectiva del desarrollo integral de la persona en todas sus dimensiones (afectiva, cognitiva, social, corporal-sexual y espiritual). Debe ser un acompañamiento oportuno, que atienda a una progresiva construcción de la identidad y al cultivo de una vida saludable y en plenitud, con herramientas de autoconocimiento, el examen ignaciano, entre otras”.